Sin categoría

¿Cuál es el origen de los tatuajes?

Si bien el momento específico del origen del tatuaje es inexacto, la primera certeza sobre esta práctica está ubicada en la frontera entre Europa y Asia, hace 5 mil años.

Ötzi es la primera persona tatuada del planeta que conocemos. Su cuerpo momificado fue descubierto por dos alpinistas alemanes en el año 1991, en los Alpes de Ötzal. Ötzi tenía la mayoría de sus tatuajes en la muñeca izquierda (¡68! para ser exactos), dos en la espalda, cinco en la pierna derecha y dos en la pierna izquierda. Se cree que estos tatuajes podrían haber sido realizados como un tratamiento curativo similar a la acupuntura.

Se sabe, por evidencia de los restos encontrados, que los pueblos primitivos grababan en su piel la forma del animal al que más miedo le tenían, para evitar tener malos encuentros con él. En algunas tribus asiáticas, el tatuaje se utilizaba como muestra de valentía o madurez.

El pueblo polinesio era uno de los más propensos a tatuarse. De hecho, la palabra tatuaje viene de tátau, del samoano, que es el idioma que hablan allí. Los polinesios tenían la costumbre de tatuar a sus integrantes desde muy pequeños. A medida que crecían, continuaban tatuándose hasta llegar al punto de no dejar ningún punto del cuerpo sin tatuajes, como forma de asustar a los enemigos. La creación del tatuaje está en muchas leyendas polinesias, pero todas coinciden en que el origen es celestial y, por ello, un regalo de los dioses.

Los marineros llegados a la Polinesia extendieron esta costumbre por todo el mundo. El Capitán Cook fue el expedicionario que introdujo en la sociedad occidental el concepto del tatuaje, que aparece por primera vez en el diario de su segundo viaje hacia ese lugar, en el año 1769. A partir de allí, el término rápidamente se popularizó en otros idiomas, y su práctica fue acrecentándose con el correr de los años.